Publicación realizada por El Surti en la fecha 26-02-2024. Reportaje de Josué Congo, Edición de Romina Cáceres y Diseño de Naoko Okamoto.
Las declaraciones de intereses evidencian las puertas giratorias del presidente, el ministro de Economía y el titular del BCP, que además tienen acciones y bonos en esos bancos.
El 5 de enero, el presidente Santiago Peña promulgó la Ley N° 7236 que modifica varios artículos de la ley de conflicto de intereses que había entrado en vigencia en abril de 2023, hace menos de un año.
Entre las modificaciones, se destaca que el grupo familiar del funcionario quedó fuera del ámbito de aplicación de esta ley, lo que favorece negociados con la parentela. Además, si el presidente o algún miembro de su gabinete incurriera en conflicto de interés, esto ya no configura causal de juicio político como en la ley original.
Otro cambio sustancial fue que se eliminó la prohibición de las puertas giratorias, un fenómeno en el que altos cargos del sector público pasan al sector privado y viceversa, utilizando información privilegiada del Estado. Un caso notorio es el de Santiago Peña, que fue ministro de Hacienda (hoy Economía) del gobierno de Horacio Cartes, luego director del banco de su grupo empresarial (Basa) y ahora es presidente de la República con el aval del expresidente.
A pesar de las modificaciones a la ley de conflicto de intereses, los funcionarios públicos deben presentar sus declaraciones juradas de intereses, que consisten en informar en qué puestos y empresas trabajó en los últimos dos años y qué cargos ocupan sus familiares más cercanos en el sector público o privado, a diferencia de las declaraciones de bienes y rentas que contienen información sobre los activos y pasivos del funcionario.
En agosto de 2023, la Contraloría comenzó a recibir las declaraciones juradas de intereses del presidente y su gabinete. Estos documentos se publicaron recién en febrero de este año. El departamento encargado del análisis tiene solo siete funcionarios y a la fecha recibió más de 14 mil declaraciones de intereses.
Analizamos las declaraciones juradas de intereses de Santiago Peña, el ministro de Economía Carlos Fernández Valdovinos y del presidente del Banco Central del Paraguay Carlos Carvallo. Tienen en común que trabajaron juntos en los bancos Basa o Ueno y hoy ocupan cargos estratégicos en instituciones del Estado que manejan la economía y las finanzas del país.
El presidente, empleado de Cartes y accionista en Ueno
Las nuevas declaraciones de intereses (DJI) confirman los casos de puertas giratorias del cartismo denunciados desde que Santiago Peña anunció su gabinete de ministros y directores de empresas públicas.
La DJI del presidente reafirma que fue director titular del banco Basa de mayo de 2021 a julio de 2022. Según el informe de Seprelad filtrado en 2022, Peña ganaba 120 millones de guaraníes al mes como director. Hoy su salario de presidente es de 37 millones de guaraníes.
En agosto de 2023, Peña presentó su declaración jurada de bienes, un documento diferente a la DJI que contiene información de todos los activos y pasivos de un funcionario público. Declaró que tenía 6 mil millones de guaraníes en acciones en Ueno Holding SAECA. Esta información no se encuentra en su declaración jurada de intereses.
En 2019, Peña tenía 1.500 millones en acciones en Credicentro —hoy Ueno Holding—, según el listado de accionistas de Ueno publicado en la web de la empresa. En cuatro años, Peña cuadruplicó sus acciones en la compañía.
El abogado Armindo Torres, director general de Control de Declaración Jurada de Bienes y Rentas y Conflicto de Intereses de la Contraloría, dijo a La Precisa que en la DJI debe figurar en qué empresa un funcionario es o fue accionista, socio o representante, en caso de que haya tenido un cargo directivo.
Sobre Peña, explicó que al no haber ocupado un puesto directivo en Ueno, no está obligado a declarar esas acciones en su DJI. «Esto no significa que la empresa donde un funcionario es accionista y no es directivo no puede ser controlada por la Contraloría», aclaró Torres en entrevista. Un caso ilustrativo es el del senador Luis Pettengill, que votó a favor de una ley que beneficiaba a una empresa en la que fue accionista y que la Contraloría concluyó que fue conflicto de interés.
Ueno Holding es propiedad del Grupo Vázquez. Durante las elecciones generales, mientras la ANR pasaba por una crisis económica, diferentes medios de comunicación publicaron que la financiera Ueno —hoy Ueno Bank— daría un préstamo al Partido Colorado, lo que Ueno desmintió.
Los cartistas que manejan la economía
Entre los casos de puertas giratorias en el gabinete de Peña, sobresale Carlos Fernández Valdovinos, actual ministro de Economía. Fernández Valdovinos fue presidente del Banco Central del Paraguay durante el gobierno de Cartes y director de Basa de 2018 a 2022, junto a Santiago Peña. De 2022 a 2023 estuvo al frente de Basa como presidente del directorio.
Según el padrón de las elecciones internas de la ANR de diciembre de 2022, Fernández Valdovinos se afilió al partido ese año. En abril de 2022, en nuestra primera investigación sobre puertas giratorias, no figuraba en el padrón colorado.
Al analizar la declaración de interés del ministro de Economía, identificamos que su cuñado, Roberto Moreno Rodríguez, fue nombrado ministro asesor de la Presidencia el 16 de agosto de 2023 con un salario de G 24.851.200, según el portal de datos abiertos de la Secretaría de la Función Pública. Menos de un mes después, se lo asignó como consejero de Itaipú con un salario de G 82.549.205. Si sumamos ambos ingresos, percibe más de 100 millones de guaraníes.
Moreno Rodríguez fue procurador general de la República de 2013 a 2017 durante el gobierno de Horacio Cartes.
Otro caso de puerta giratoria es el del actual presidente del Banco Central del Paraguay, Carlos Dagoberto Carvallo Spalding. Fue miembro titular del directorio del BCP de 2015 a 2020 y después fue presidente de Financiera Ueno SAECA —hoy Ueno Bank— de 2021 a 2023.
Carvallo Spalding dejó de ser titular del BCP en agosto de 2020. En junio de 2021 asumió como presidente de Ueno. Al comparar las declaraciones de intereses y sus declaraciones de bienes, identificamos que su patrimonio neto aumentó en un 230% de 2020 a 2023. Pasó de tener 3 mil doscientos millones de guaraníes siendo titular del BCP en 2020 a 7 mil trescientos millones de guaraníes, según su declaración de bienes de septiembre de 2023.
En su declaración jurada de bienes, Carvallo Spalding declaró tener tres mil millones en bonos en GV SAE —Grupo Vázquez, dueño de Financiera Ueno en la que él trabajaba—.
Fuente El Surti.com